Por @YerkoDanilo
¿Recuerdas el caso de Cholito? La triste historia de este perrito maltratado y asesinado en Santiago fue una de las principales motivaciones para que hoy en Chile exista una ley que sanciona el maltrato animal con multas que van desde 1 a 30 UTM y, en caso de abandono, la condena es de 61 días a 3 años en cárcel o una multa, lo que queda a decisión del juez.
Estas medidas han sido implementadas para que en nuestro país se tome conciencia que un animal no es un juguete, es una vida que también requiere de cuidados específicos. Hey, stop: ¡No queremos más perros maltratados, ni abandonados! Queremos mascotas MUY felices, cuidadas y que sean uno más en la familia.
Hoy estamos camino a ser un país que protege a nuestras mascotas y nos encantaría poder destacar en algunos años más de manera positiva por aquello, tal como sucede actualmente en estos dos lugares del mundo:
Pet-friendly: No hay nada como poder pasear y vitrinear con tu mascota un sábado, aunque en Chile son escasas las tiendas que te permiten entrar con este tipo de compañía. En Miami la realidad es distinta: Es una de las cinco ciudades más amigables para residentes y turistas que tienen mascotas. Muchos lugares para comer, entretenerse y hospedar toleran a visitantes que llevan consigo a sus mascotas, según el sitio de turismo RewardExpert (si encuentras que dar la fuente es too much informativo, avísame, pero igual encuentro que hay que decir de donde sacamos la info y que no es inventada jajaja)
Pet-lover: Nuestros vecinos de Argentina también destacan por su amor a los animales, ¡es el país con más mascotas por habitante en el mundo! El 80% de los argentinos tiene al menos un animal doméstico, mayormente perros, según cifras entregadas por GFK Group. AMOR por los animales les sobra.
¿Sabías que Vesta tiene dos mascotas rescatadas?
“Happy y Nona son miembros de la familia Lugg-Fournier. Se unieron en épocas y continentes distintos. A Happy lo encontré el 2012, atropellado en una avenida principal de Santiago. Había estado todo el día al costado de la calle, al sol en pleno verano y la gente pasaba y pasaba. Yo estaba a punto de tomar micro para irme a una reunión y me impactó el poco tino y poca capacidad de las personas de responsabilizarse por otros seres vivos. En ese minuto, Happy pasó a ser una prioridad y parte de la familia.
A Nona la rescatamos de una veterinaria en Ottawa, Canadá. Pretendíamos regalársela a mi abuela, pero ya no podía responsabilizarse de la gata, así que Nona pasó a ser una de las gatas más viajadas que conozco.
Los perros y gatitos son adorables cuando son chicos, pero no están hechos para ser adorables, están hechos para que seamos mejores amigos, de por vida.”
