Contacto

“SIEMPRE HE TENIDO LA MENTE MUY ABIERTA”

Desde Madrid, el actor ÁLVARO MEL se sincera sobre la superación de inseguridades, su proceso de deconstrucción y la importancia de cuidar la salud mental.

✍ x @yerkodanilo / 📸 x @nicovigneaux


Conversar con Álvaro es hablar con una de esas personas que has visto cambiar, adaptarse, crecer y desafiarse, pero siempre a través de una pantalla, por lo que en esta cita presencial, muchas preguntas estaban en la espera de su respuesta.

Conquistó el mundo digital con su contenido y hoy son más de 1,2 millones de personas que lo siguen en Instagram, pero actualmente él enfoca sus energías en un área distinta: la actuación.

Su debut actoral fue en una ficción del 2018, emitida en el prime time de TV abierta, y últimamente protagonizó “La Fortuna” para una plataforma de streaming, donde su actuación le significó una nominación en los Premios Forqué a “Mejor actor de serie”.


MV: Hemos sido testigos de tu evolución y nos gusta la faceta que vemos hoy. ¿Qué te genera a ti lo que vives ahora?
“A día de hoy quiero todo lo que tengo y estoy contento con todo lo que tengo. El presente lo vivo con ganas de aprender, con ganas de empaparme siempre de todo lo que pase, de exprimir todo al máximo y valorar las cosas. Cuando estábamos en cuarentena, lo único que quería era salir y tomarme una cerveza con amigos o dar un paseo por El Retiro; ahora parece que volvemos a no valorar eso, cuando realmente eso era lo que todos queríamos hacer hace un año. El presente consiste en vivir así, apreciar los pequeños momentitos y valorar las pequeñas alegrías que al final es lo que te da la vida”.

MV: ¿Aún cuestionan si eres el chico de redes sociales o el actor?
“A veces lo preguntan y siempre dejó claro que realmente me quiero centrar ahora en la interpretación. Obviamente no reniego de dónde vengo, que vengo de las redes sociales y han servido económicamente para poder vivir en Madrid”.

MV: ¿Has pensado alguna vez por qué fuiste uno en un millón?
“Sí, lo pienso muchísimas veces. Desde pequeño tengo un cuento sobre esto, lo llamé “Player one”, esa fue la primera visión que tuve de ya no de ser uno en un millón, sino de por qué soy quien soy. Estoy en un sitio en el que esperaba estar, trabajando de lo que me gusta, donde no hay tantas oportunidades, y siempre llego a la misma conclusión: he llegado hasta aquí por decisiones que he tomado. Hay una parte de suerte, una parte de decisión, hay mucho trabajo obviamente, pero lo pienso y todo parte desde que fui a estudiar arquitectura a Valladolid, que no tiene nada que ver, pero fue tomar esa curva para tomar esta recta… No te sabría decir la fórmula mágica, pero sí sé que son decisiones. ¿Qué estaría haciendo sino? Lo hablo con mi pareja y me dice ‘no sé, de seguro te hubieses buscado la vida de alguna forma creativa’, pero no lo sé, nunca lo sabremos”.

MV: Hace años que hablas del miedo a la soledad, ¿sigue estando ese miedo ahí?
“Sí y además no es miedo a estar solo, porque estar solo realmente me gusta y lo adoro, adoro estar solo mucho tiempo; es el miedo a la soledad, a no tener a nadie. Tú sabes que estás solo y aun estando solo, sabes que tienes gente, pero es a la palabra soledad, a no poder recurrir a nadie y sentir la soledad aunque estés rodeado de gente, eso es lo que me da miedo”.

MV: Muchos temores de adulto pueden arrastrarse de la infancia…
“No lo sé la verdad, no sé de dónde viene ese miedo a la soledad, pero creo que cada uno tiene sus cositas en la infancia y en la adolescencia. En este caso la soledad no creo que sea ningún trauma sacado de ahí porque yo creo que tuve, dentro de lo que cabe con sus pros y sus contras, una infancia normal y una adolescencia normal”.

LUCES, CÁMARA Y… MOSTRAR QUIEN DE VERDAD ERES

MV: ¿Eres una persona tímida?
“Sí, mucho, soy #MuyTímido”.

MV: Con una exposición como la que vives hay dos opciones: ir superando inseguridades o dejar que aumenten. ¿Cómo ha sido tu caso, Álvaro?
“Ahora mismo no soy para nada tímido en comparación con lo que era hace 5 años, pero me sigo considerando tímido. Hace 5 años no hubiera venido a esta entrevista, no hubiera quedado con nadie en un bar, me hubiera costado muchísimo. Ahora bien, te dedicas a trabajar con tu cuerpo y tus sentimientos, sigo siendo reservado muchas veces, pero esa timidez fuera de cámaras o con la gente la he ido superando poco a poco, no te queda otra. O te anclas ahí en ser tímido y no hablar con nadie o vas superando poco a poco y acabas dando el pasito al ser tú el que dice ‘hola’. Hoy ya hace 4 o 5 añitos empecé a cambiar las cosas así.

MV: La gente cree que ser famoso es siempre luz, pero también tiene sombras, ¿cómo te llevas con esa oscuridad?
“Esto no lo he contado en ninguna entrevista… Hace unas semanas tuve un susto con la cabeza, un pequeño gran ataque de ansiedad y por eso ahora estoy en el gimnasio y con todas estas cosas. Hay que tener cuidado con eso, es realmente la fama. No me considero famoso y tal, pero sí que es verdad que tanta exposición al final tiene sus cosas malas. En una semana acumulé muchas cosas y eso hizo que mi cabeza reventara, me dijo que parara, que no podía más y yo no lo había ido a ver”.


“Era una cosa tras otra, alternando trabajo con exposición, con entrevistas, con todo y al final mi cabeza explotó”.


“Es verdad que mucha gente desea fama, exposición o reconocimiento, pero es algo que no es jiji jaja, también tienes que saber compaginar eso con tu cuerpo, escucharlo. Parece una tontería cuando lo dices y explicas así, pero muchas veces te toca tanto al cuerpo como a la mente. Yo estoy #MuyConsumido de peso, con la promoción de la serie ‘La fortuna’ siento que bajé de peso. Hay situaciones a las que te vas a enfrentar sin saber qué te espera, yo voy a una editorial y no sé quién me va a hacer las fotos, cómo van a hacer las fotos, no sé qué ropa va a ser, no sé con quién voy a tratar”.

MV: ¿Cómo es en España hablar de salud mental? Porque en Chile ha sido tabú muchos años.
“Aquí ha sido exactamente igual. Cuando se hablaba de enfermedad mental la gente tenía como concepto una esquizofrenia o algo mucho más fuerte a nivel psiquiatra o más allá, una enfermedad grave, y no es así, o sea, una enfermedad mental parte desde una pequeña ansiedad, una pequeña depresión. Gracias a que se está hablando de ello, va dejando de ser tabú y hasta hace poco lo era. Hay que normalizar el hecho de ir al psicólogo, el hecho de tener una depresión o de tener una pequeña ansiedad. Cuando tuve este pequeño ataque tuve que cancelar lo que tenía, incluso un viaje para entregar un premio. Me sentí un poco mal, era una de las primeras veces que cancelaba algo por salud mental. Hoy te rompes una pierna y vas a ir al médico… Con los problemas mentales hay a ir al psicólogo”.

MV: ¿Cómo te llevas con la incertidumbre de la vida?
“Genial, ya he dejado de organizar cosas. La verdad es que es de una semana para otra lo que organizó y también estoy aprendiendo mucho a decir que no últimamente, entonces no me meto en compromisos a largo plazo. No puedo organizar una cosa para el mes que viene porque no sé qué voy a hacer el mes que viene”.

MV: Te nominaron a un Forqué y no puedo dejarlo fuera de esta conversación. ¿Cómo procesaste eso?
“Yo creo que mal, no tenía idea, o sea, no sabía cómo gestionar eso. Fui a leer unas categorías y de repente mi compañera de trabajo leyó a Mejor actor de serie y me leyó a mí y en ese momento fue como ‘¿qué acaba de pasar?’ y nada, obviamente #MuyContento, #MuyFeliz, pero no me lo esperaba para nada”.

MV: Esta nominación es una especie de validación a nivel de industria, ¿esperabas que alguien te dijera ‘lo estás haciendo bien’ o vas bien por tu camino?
“Hay una mezcla de ambas, aquí si no me equivoco son los productores los que votan, pero sí que hay una mezcla. Está la satisfacción personal de haber hecho un proyecto así y de haber trabajado bien, porque considero subjetivamente que he trabajado bien. Luego me centro poco en los comentarios positivos y negativos, me centro en los comentarios constructivos de gente que me importa. Obviamente agradezco muchísimo que me digan que lo he hecho bien y también agradezco que me digan que lo he hecho mal, pero estos premios son algo que te alegra, te reconocen que hiciste un trabajo bien. Me alegro mucho por mí, me alegro mucho por Ana (Polvorosa) y me alegro mucho por ‘La fortuna’”.

MV: Estamos en tiempos donde la deconstrucción es clave. Conductas, conceptos, paradigmas. ¿Cómo ha sido tu proceso de deconstrucción?
Mi deconstrucción empezó cuando llegué a Madrid, sobre todo a nivel mental, a nivel de cambiar ideas, no es que yo haya sido una persona con prejuicios, ni con actitudes machistas, ni con actitudes de mierda, que sí las he tenido, pero al llegar a Madrid te das cuenta de cosas que existen más de lo que crees. Con la serie ‘La otra mirada’, por ejemplo, aprendí mucho de mí mismo, vimos que realmente muchas cosas a día de hoy siguen estando normalizadas, esta serie trataba mucho sobre eso”.

MV: ¿Cuál fue tu última paso de deconstrucción?
“Es que no te sabría decir, tío, siempre he tenido la mente #MuyAbierta, siempre he escuchado antes de hablar y siempre he observado antes de actuar. No te sabría decir algo en concreto”.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de ÁLVARO MEL (@meeeeeeeel_)

MV: Siento que compartes mucho menos de tu vida, ¿es una decisión consciente o es algo más natural?
“Es consciente, realmente tampoco he sido mucho de compartir cosas sobre mi vida íntima, sí que había una época donde lo hacía más. Ahora intento compartir arte, intento compartir ideas y causas que no tienen altavoz”.

MV: ¿Cuáles son las características que te hacen ser #MuyÁlvaro?
“Déjame pensar. Observador, sensible y diría carisma, pero no estoy #MuySeguro. Y está mal que lo diga yo, pero soy buena persona”.

MV: Antes de despedirnos, ¿qué nos puedes contar de tu 2022?
“Pues que no espero nada, espero no morirme (ríe). A nivel profesional estreno ‘Paraíso’ y a nivel personal espero estar centrado en mí”.


Próximamente, Álvaro dará vida a Mateo en la serie “Paraíso”, de Movistar+, un personaje con un pasado misterioso y con uno que otro secreto que no debiesen ver la luz.