Por @karlitamorav
El próximo 10 de marzo entra en vigencia la ley nº 21.400, conocida como ¨Ley de Matrimonio Igualitario¨, la cual no sólo otorgará la posibilidad de contraer el vínculo legal, sino que además entregará reconocimiento en materia filiativa, sea por adopción o por técnicas de reproducción humana asistida.
Esta ley también garantiza la igualdad en el ámbito de seguridad social, derechos de herencia, decisión frente a la interdicción de la pareja y contar con el reconocimiento del patrimonio construido en conjunto. Derechos que hasta hace poco, no estaban garantizados para todes, y que el Acuerdo de Unión Civil no contemplaba.
Y lo que para algunos no es un plan a futuro en lo absoluto, para otres sí es un anhelo convertido en realidad, como la historia de Hugo y Francisco, que tienen una relación de 16 años y conviven hace más de una década, compartiendo su hogar con su perrita.
Juntes han logrado muchas metas, se han acompañado en momentos importantes y han construido una familia, sin embargo, algo les hacía falta.
A pesar de que existe la Ley de Unión Civil, ellos no podían acceder al matrimonio y lo que este conlleva legalmente. Además, para elles era fundamental este vínculo especial que anhelaban tener.
En este contexto, Hugo hace una reflexión sobre la reciente promulgación: “La recibimos con mucha felicidad, sentimos que al fin nuestros derechos están siendo valorados, el matrimonio nos permitirá formar una familia, nos sentimos validados como personas, ya que por ser homosexuales sólo teníamos la opción de la Unión Civil, la que si bien es válida, no otorgaba las mismas facultades, es un reconocimiento a nuestros derechos e igualdad frente a la sociedad“.
Porque el lenguaje es clave en nuestras vidas, el cambio comienza en la forma de referirse a los contrayentes, modificando el lenguaje de la institución, dándole un carácter igualitario, reemplazando el clásico “marido y mujer”, por ejemplo.
“Estamos #MuyContentos, es algo que esperábamos hace mucho tiempo, no habíamos querido optar a la Unión Civil porque sentíamos que la sociedad nos discriminaba al tener que llevar a cabo un tipo de contrato excluyente, y no el mismo que el de una persona heterosexual, su promulgación es un gran avance en políticas públicas”.
Incluso, emocionados relatan que ya cuentan con sus padrinos y madrinas, que tienen planes de una ceremonia sencilla, sin fiesta, porque prefieren viajar juntos y marcar este hermoso momento con una luna de miel soñada que les recuerde por siempre cómo comenzaron legalmente a ser familia, ¡aunque sabemos que son familia desde hace mucho tiempo! Les deseamos un feliz matrimonio.
Si bien la ley es un gran progreso para la colectividad de nuestro país, nos falta avanzar hacia la igualdad de derechos en diferentes aspectos y ámbitos. Hugo reflexiona en ellos y nos menciona que efectivamente estamos al debe en temas tan relevantes como educación, salud, pensiones, etc., y que debemos seguir evolucionando como sociedad para alcanzar la equidad.
¡Estamos #MuyFelices de que Chile siga avanzando en igualdad!