¿ATREVERTE A BAILAR PUEDE CAMBIAR TU VIDA? SÍ
Cuatro mujeres #MuyDistintas nos cuentan su experiencia para motivarte, ¡no puedes rechazar esta invitación po! 💃
Por Equipo Muy Vesta 💋
ADVERTENCIA: Puede que luego de esto, no pierdas nunca más la libertad para moverte con cada canción, y nos encanta. Las mujeres que dan su testimonio aquí concluyeron que para bailar, solo necesitas ganas de fluir y disfrutarlo. Considéralo un spoiler y recuérdalo 💜.
Sabemos que tienes la costumbre de decidir por una opción y dejar otras atrás, en lugar de complementarlas, porque vives es una sociedad que así te lo exige, porque si alguien nota que hay dos pasiones inspirándote, de inmediato surge la pregunta ‘pero ¿qué te gusta más?‘ 🥴🥱.
Toma todo ese párrafo y olvídalo, porque hoy no te haremos decidir, hoy, con las historias de Anto (19), Ayleen (21), Damaris (22) y Kelly (19), queremos que te atrevas a sumar el baile a tu vida, sin importar lo qué haces, a qué te dedicas o qué se espera de ti. Esto es por y para ti, si la sociedad espera que sigas sus estructuras, bueno, que siga esperando y sea paciente 😘.
Mientras Anto estudia para ser profesora de educación física, Damaris es picker el fin de semana. Así como Ayleen dice que está en la misma parada que las personas de su edad, Kelly siente que vive procesos distintos a los de su generación.
Ninguna se parece a otra, vienen de lugares distintos y quieren llegar a lugares diferentes también. Mucho las distancia, pero algo fuerte las une y las hace fuertes a ellas: bailar.
Las cuatro son parte de Power Peralta Dance Studio, donde una sala de baile las reúne y se convierte en una zona cómoda y sorora para soltar y absorber, para sentirse “lo más mujer que puedes ser, no sientes que miran con doble intención, no sientes que te están sexualizando, estoy en una zona segura“, nos dice Anto.
MV: ¿CÓMO LLEGÓ EL BAILE A SUS VIDAS?
AYLEEN: “Cuando terminé el colegio, pero no lo tomé en serio, era una entretención para el verano, pero esos dos meses bastaron para darme cuenta que esto era lo que quería”.
KELLY: “A los 4 años mis papás decidieron matricularme en una academia, mi hermana ya estaba bailando y a mis papás les gustaba que participáramos. Gracias a eso, el baile empezó a ser parte de mi vida”.
DAMARIS: “Siempre me gustó mover mi cuerpo, siento que llegó a mí con los programas de baile en TV. Fui creciendo y participé en presentaciones del colegio, entonces siempre ha estado en mi vida, antes era por diversión, hoy es lo que quiero hacer el resto de mi vida”.
ANTO: “Me gustaba bailar en los recreos y cuando salí de octavo el director del colegio le dijo a mis papás que me metan a algo de baile porque veía futuro en mí y mis viejos se miraron las caras y dijeron ‘hay algo aquí que no estamos viendo’“.
MV: ¿CÓMO ES LA VERSIÓN DE TI QUE DISFRUTA DE BAILAR?
DAMARIS: “Tiene una seguridad mental y corporal, una conciencia… Mi nueva versión quiere indagar, sentir, conectar e investigar mi cuerpo”.
KELLY: “La palabra conciencia ha sido clave, especialmente ahora, es conciencia corporal y mental”.
AYLEEN: “Es #MuyDiferente a la de antes, soy más valiente y más segura, agradezco cada oportunidad que se me da y la vivo al mil, es la mejor enseñanza que me ha dado el baile: vivir cada momento al mil y agradecer infinitamente”.
ANTO: “Más responsable, ya no pienso en el baile como antes, es mi diversión, pero también es mi método de trabajo. Soy una persona con responsabilidades y que respeta el baile”.
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En tiempos actuales es importante crear espacios de convivencia que sean sanos, donde la sororidad sea protagonista. ¿Se podrá? O mejor dicho, ¿se puede relacionar la palabra ‘baile’ con este concepto? “Totalmente”, nos asegura Ayleen, porque para ella “ambas significan amor y es fundamental tener sororidad en el baile, más para las mujeres, donde el baile es un poco castigador con el tema físico. Ante eso, la mejor solución y el mejor remedio es que nos apañemos entre mujeres para quitar todos esos estigmas, crear un ambiente de puro amor”.
MV: MUCHES NO BAILAN POR SENTIR QUE NO LO HACEN BIEN. ¿SE NECESITA SER BUENA PARA BAILAR?
ANTO: “No, para nada, bailar es el simple hecho de sentir el ritmo de la base, estar palmeteando el pie, la cabeza, sintiendo el ritmo, eso ya es bailar, y ya perfeccionarte y estudiarlo es gusto propio”.
AYLEEN: “Lo rico de este arte es que es para todos, sin importar nada, ni siquiera cómo lo hagas, y puede entregar la misma felicidad, simplemente te tiene que gustar y hacerlo desde el corazón, con eso basta”.
DAMARIS: “Uno no tiene que tener una meta de la perfección, en el baile lo imperfecto es lo más hermoso. No es querer lograr algo correcto, ¡es todo lo contrario”.
MV: KELLY, ¿QUÉ MUJER TE INSPIRÓ PARA BAILAR?
“Mi madre ha sido fundamental en mi proceso de baile, me apoya desde chica y me ha inspirado a expresarme. Antes bailaba con cara de enojada y ella me decía ‘sonríe, ¡lánzate!’. Ella es #MuyExpresiva y me invita lanzarme, ha sido un pilar fundamental”.
MV: ¿QUÉ CARACTERÍSTICA LAS HACE SER #MUYTÚ A CADA UNA?
ANTO: “#MuyDirecta”.
AYLEEN: “#MuyTrabajadora”.
KELLY: “#MuyTransparente”.
DAMARIS: “#MuyEnergética”.
Todas son de respuestas distintas. La diversidad de historias e intereses que encontramos en ellas nos refuerzan la idea de que no tienes que ser como otra persona para hacer del verbo “bailar” el más conjugado en tu vida. Con ser como eres, ya tienes todo para poder hacerlo. Es así de simple.
A veces no ver “gente como nosotres” haciendo algo, como bailar, nos hace pensar que eso no es para nosotres, pero cuando la representación no existe, ¿por qué no ser tú? A Ayleen la inspiró su mamá, ¿te imaginas que tú, solo por dejarte fluir bailando, puedas inspirar a otres a sentirse así?
Oye, por si necesitabas leerlo: hazlo, ¡dale no más! Después nos cuentas cómo cambió tu vida al dar ese paso… porque dar pasos será tu nueva herramienta, el baile no resta a ninguna de tus otras pasiones, el baile suma, el baile TE suma 😉.