Por @yerkodanilo
A la hora de tomar decisiones, tienes dos opciones: seguir haciendo lo mismo de siempre o atrevernos a innovar. Para su proyecto musical, Aitana decidió tomar el segundo camino y hacer lo que nadie esperaba de ella, lo que nadie pudo anticipar y hoy le habla a “Alpha”, la generación del futuro, con un pop donde la electrónica tiene protagonismo.
MV: Veo a una Aitana que se permitió crecer y avanzar para proponer algo tan grande como es hoy Alpha. ¿Qué más te has permitido en esta etapa de tu vida?
“Este disco es mucha verdad y recuerdo haberte dicho que es sobre una generación, de empoderamiento. Alpha es la generación que viene, no es mi generación, y es hablar hacia el futuro, es importante. Me he permitido mucho, yo quería hacer música para bailar, los tiempos que estamos viviendo son un poco locos y es importante experimentar el salir, soltarlo todo, pasarlo bien y disfrutar. Quería hacer música de club, pero tú sabes que el reggeatón no es mi fuerte, aunque me encanta bailarlo (risas), pero no es lo que suelo hacer, así que he hecho pop electrónico, pero como en la vida misma no todo es disfrutar, también hay momentos más tristes y difíciles, que también están en las letras de Alpha, es música de club, pero también hay canciones para bailar #MuyLento, pero bailar llorando, ¿sabes?”.
MV: ¿Permitiste entonces canciones como “Vas a quedarte”, a corazón abierto?
“Sí, de hecho casi todas son bastante reales. Hace poco vi a Rosalía diciendo que cuando va a un restaurante no le pregunta al chef qué tiene el plato, es una cosa suya y lo interpreto como quiero. Y es un poco lo que me pasa con las canciones, que a veces por no querer hablar demasiado de mi vida personal, hay algunas cosas que prefiero guardar, pero es difícil porque te dicen ‘¿y esta canción? ¿de dónde la has sacado?’ y claro, a veces expones demasiado de tu vida, porque hago mis canciones y muchas de ellas hablan de mí, pero también hay otras que no. En este disco lo voy a dejar a la imaginación de la gente (risas), cuento historias y no todo es tan literal”.
MV: En “Los Ángeles” sentimos fuerte el color negro, pero con “Las babys” hay un color es más celeste, con toques de rosado. Estamos muy expectantes de conocer los otros colores del disco. ¿Qué le falta a la gente aún por vivir, sentir y experimentar con lo que se viene?
“La gente realmente no se lo espera, pero hay una paleta de colores #MuyAmplia y de hecho de eso va Alpha, es color realmente. Ya lo entenderán con la portada y con cada canción, porque están relacionada a un color, cada uno tan distinto. Hay una canción que cuando se la mostré a mi manager me dijo ‘no me había pasado tener ganas de bailar, pero es que me da pena, me está dando pena esta canción’ (risas), hay un poco de todo”.
MV: ¿Cuál es tu color-canción favorita del álbum hoy?
“Ay, Dios mío…Ay, no lo sé, voy a cambiar tanto, pero el cian me encanta, es como un azul más turquesita”.
MV: ¿En qué etapa está el álbum?
“Creo que 90% listo… Me faltan las cosas finales, finales, pero con la fuerza que trae, 95% listo. No queda nada, cuando vaya a Chile ya habrá salido hace tiempo el disco, se tienen que aprender las canciones (risas)”.
EL REGRESO EN GRANDE
En noviembre del año pasado, Aitana estuvo 3 días en Chile: conoció un poco de Santiago, hizo nuestra portada de diciembre y cantó para 5 mil fans en el Teatro Caupolicán. Ahora prepara su vuelta a Chile, pero el escenario es distinto: un Movistar Arena.
MV: ¿Estás lista para debutar en el icónico escenario de Chile?
“Tengo muchos nervios, sé que es un recinto muy difícil, que es difícil de llenar porque realmente es de los más emblemáticos de su país… Tengo miedo, cuando me dijeron yo dije ‘sé que va a costar mucho, pero vamos con todas y lo vamos a intentar’. Realmente voy a enseñarle al mundo este nuevo disco que es algo #MuyDistinto, vamos con un show completamente distinto, es una nueva yo de alguna forma y es bonito que pueda ir a Chile, se va a lograr”.
MV: ¿Qué te marcó de nuestro país en tu primera visita?
“Hay una cosa que me traje y que creo que se la llevó mi padre a Barcelona… Recuerdo llegar a Chile y lo primero que me dieron llegó a mi padre y él se emocionó un montón… Ay, ahora me voy a emocionar. Era un marquito con una ilustración con mis padres y mi equipo del viaje, pero para el viaje de Chile mi madre estaba con un tema de salud por el que no pudo venir y para todos fue #MuyTriste, incluido mi padre. Ellos llevan toda la vida juntos. Cuando le dan a mi padre eso fue súper emotivo para todos, todos los días ponía el marquito para dormir, ¡lo amo! Es algo que me llevo para siempre de Chile, al igual que la gente… Fue algo precioso”.